Editorial
En el año 2020, la Superintendencia de Sociedades recibió 1.292 solicitudes de insolvencia de parte de las empresas, 20 más que en 2019, lo que supone un aumento del 2% de un año a otro.
Si bien ya se han materializado en las finanzas de las empresas los efectos devastadores de la COVID-19 en un incremento de las solicitudes, el virus de la pandemia sobre las empresas impactará, sobre todo, en el presente año, según el Índice de Insolvencia Global de Euler Hermes, ubica el avance promedio global en el 35% para el 2021 respecto a los niveles que se han registrado a lo largo de 2020.
Las ayudas del Gobierno en caja, subsidios y otros apoyos han evitado un mayor incremento de las solicitudes de insolvencia. Sin embargo, con la previsión de que los gobiernos empiecen a eliminar las ayudas estatales este año, el reto al que se enfrentan ahora las empresas es a cómo detectar a los clientes y proveedores de alto riesgo para proteger a su empresa contra las insolvencias y poder seguir a flote.
En este entorno económico, la visibilidad y la conciencia del riesgo son fundamentales para prever posibles situaciones de impago o insolvencia de tus clientes. Si vendes a crédito y no cuentas con la protección adecuada, podrías enfrentarte a una pérdida financiera importante.
En este sentido, el seguro de Crédito es una herramienta clave que no se limita al pago de una prima y a una posterior indemnización, sino que comienza desde el principio y se centra, cada vez más, en la prevención predictiva de los riesgos comerciales latentes.
Nuestro compromiso como aseguradora con tu negocio es hacer todo lo posible por identificar a los socios comerciales de alto riesgo y evitar posibles situaciones de impago o insolvencia antes de que puedan materializarse.
Atentamente,
Jorge Andrés Jiménez C.
CEO Solunion Colombia