La economía de Colombia en 2022 se mantendrá fuerte, aunque tendrá que hacer frente a importantes desafíos como el paro, la inflación y la incertidumbre política. En este artículo analizamos las claves para el mercado colombiano que se recupera tras el impacto de la crisis de la COVID-19.
Logros de la economía de Colombia en 2022
A pesar del panorama político incierto, la economía colombiana parece ganar tracción: estimamos que el PIB, en términos reales, se ha recuperado a niveles previos a la pandemia desde el último trimestre de 2021 (+9,5%) después de la caída de -6,8% en 2020. La recuperación se debe, principalmente, a un fuerte repunte de la demanda interna, en parte provocado por el efecto rebote. Sin duda, también es una consecuencia positiva del impulso fiscal por parte del Gobierno para enfrentar la pandemia.
En contraste, otros países de Latinoamérica que no incrementaron el apoyo fiscal, se encuentran en una situación donde el crecimiento del PIB está estancado y no logra recuperarse a niveles previos a la pandemia. Sin embargo, uno de los retos más grandes para el crecimiento económico en Colombia es el desempleo, que aún no regresa a niveles anteriores a la crisis de la COVID-19, y cerró el año en un 11%. Esperamos que 2022 cierre con un 10,5% de desempleo y baje a 9,7% en 2023.
Por otro lado, es importante destacar que, a pesar de las presiones que ha generado la pandemia por la deuda externa, las finanzas públicas han venido mejorando:, el déficit fiscal del 2021 fue de un 6,2% (frente al 7% proyectado por el Gobierno) y además el país goza de un buen momento en su caja con el precio del BRENT por encima de los 90 dólares americanos.
Algunos desafíos para la economía colombiana
Otro de los retos económicos es la alta inflación. A pesar de que las presiones inflacionarias se vieron más fuertes en otros países de la región en 2021, Colombia cerró el año en un 5,6%. Enero trajo consigo una fuerte aceleración del incremento de precios para Colombia y actualmente vemos un 7% de inflación anual. A pesar de que el alto precio de las materias primas apoya el crecimiento en la región, la escalada de precios también ha ocasionado presiones inflacionarias. En Colombia, hemos visto cómo los rubros de vestido y calzado, así como los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas han presentado las variaciones más altas de precios a inicios del año. Esto hace que la inflación deprima el ingreso de los hogares y probablemente veamos un deterioro en la demanda nacional por la pérdida de poder adquisitivo de las familias.
Habrá que permanecer atentos a las medidas anunciadas por el ministro de Hacienda en días recientes, importantes para controlar la inflación principalmente generada por el sector de alimentos, que darán celeridad a la ley agrícola que tiene como fin controlar los precios de los insumos y realizar ciertas exenciones para la importación de alimentos .
Viendo las tendencias y presiones inflacionarias, el Banco de la República sorprendió al consenso y elevó su tasa de referencia en 100 puntos base, hasta el 4,0%. Esperamos que las presiones inflacionarias cesen este año y que el periodo de 2022 cierre con una inflación anual de 4,5%. En 2023, la cifra podría estabilizarse en el 3,5%. También se espera que, a nivel global, las políticas monetarias se empiecen a endurecer, lo que pondrá presión sobre el crecimiento, pero ayudaría a combatir la inflación.
La confianza industrial en Colombia se ha recuperado en comparación con 2020 y cerró 2021 con un balance positivo, aunque estas percepciones tendrán en cuenta los pedidos actuales y los problemas en las cadenas de suministro. La percepción de la situación económica actual tendrá un gran peso en los resultados del inicio de año y puede que tenga una lectura menos optimista.
Los grandes retos en la economía colombiana en 2022
La economía colombiana en 2022, estará muy influida por las elecciones presidenciales. Sin un claro ganador, los comicios se perciben difíciles de pronosticar. A medida que las elecciones se acercan, y se presentan luchas internas en las coaliciones de derecha y centro, la gobernabilidad y continuidad en materia de política pública puede verse entorpecida y agravada por la creciente polarización. Aunado a esto, el riesgo social – en tema de protestas y disturbios – es alto, y las debilidades del mercado laboral por la pandemia han perturbado las tensiones sociales existentes.
Autores:
Patricia Pelayo Romero – Allianz Economic Research: Insurance Foresight
Jose Miguel Duque – Analista de Riesgos de Solunion Colombia.
